Nunca me había encontrado tan sola en el mundo y el vacío que siento en el pecho, es tan intenso que me produce dolor físico, meditó. Entonces, sale de su casa y empieza a caminar...
Es una tarde de mayo, el bochornoso calor la hace fastidiarse más. Qué más puede salir mal? Se pregunta ella.
Avanza sin rumbo y se detiene en una banca a reflexionar...Fue mi error? Todo es mi culpa...
El ruido que producen los pasos de una pareja, la sacan de sus cavilaciones. Nota que él la lleva tomada de la mano y ese detalle la hace suspirar...
NO!!! Se grita a sí misma. Reacciona! Eso es un espejismo! Sin embargo, ella lo había vivido, había amado a ese ser con toda la intensidad que su alma le permitía. Qué fue lo qué pasó? Ni ella misma podía recordarlo. En qué momento su frialdad empezó a apagar sus latidos? Dónde quedaron esos días interminables de risa y diversión? Esas noches cálidas entre sus brazos...no volverán?
Todo es tan confuso...tanta apatía está matando sus ilusiones, al punto que decide terminar con el dolor.
Se acerca al puente y contempla el paisaje que se asoma a sus pies. Cuánta belleza en la naturaleza! Pronto me uniré a esa paz que refleja el agua de ese riachuelo...
Decidida, sube al barandal que la separa de su anhelo de volar...de volar por un momento, sentir el aire despeinándola...y por fin..respirar libertad...
Duda un poco porque sabe que lo va a extrañar...pero ya ha tomado la decisión...
Toma aire y...se arroja. Siente sus pulmones inundarse de una sensación plena...y todo se oscurece a su alrededor...
Despierta! Despierta! Una voz dulce y agradable que reconoce de inmediato, le susurra...estás bien? Tranquila, Sólo fue una pesadilla, estás aquí conmigo. Ella reacciona y se alegra de encontrarse en sus brazos. Su lugar favorito. Su refugio seguro. Ella recuerda cuánto lo ama y piensa que su único deseo, es quedarse ahí, acurrucada junto a él.
Se alegra de que todo hubiera sido un sueño, sólo un mal sueño...
Esta es la historia de un sábado del cálido mes de marzo y de una mujer sentada tomando un café. Toma la taza y le tiemblan las manos. Qué hago aquí? medita. Empieza a recordar...
Ella se ha sentido derrotada. Ella sentía que en la jaula metida, la vida se le iba y quizá era tiempo de volar. Se sentía tan frágil. Es hora de las fuerzas probar, se decidió.
Se pregunta que hace ahí sentada frente a un extraño. La emoción y los nervios se mezclan. El loco extraño inmediatamente la hace reír y sentirse cómoda. No me equivoqué, musitó para ella.
La velada transcurre rápidamente. Ambos son sorprendidos por el amanecer. Ella se queda con un dulce sabor a miel en los labios. El loco extraño ha superado las expectativas. No habrá más noches tristes, le dice una voz.
Ella sabe que una emocionante aventura acaba de empezar.
La sangre regresa a sus venas...
Observa la luna y...vuelve a sentirse viva...
Ella va entre la gente...sólo es un rostro anónimo. Pensamientos, sueños, ideas, tribulaciones...qué pasa por la cabeza de todas esas personas que caminan absortas? se pregunta. Una lágrima recorre su mejilla. Afortunadamente, la lluvia disimula su llanto. Nadie nota que tiene su alma herida. Bendita lluvia. Sonríe y finge que todo está bien cuando ve un rostro conocido. Qué piensas? le pregunta el individuo. Nada, le miente. Ella está cansada. Su cabeza le da vueltas, está a punto de explotar. Esto tiene que cambiar, reflexionó. Decide empezar a escribir. Una introspección no me vendría mal. Y suspiró. Ella tenía la esperanza que no todo podía estar tan mal. Debe haber algo más allá, susurró ilusionada.
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